Con la apertura de este centro, -que integra la exposición permanente de la maqueta de Santander en el siglo XVIII, la oficina de atención al peregrino y la librería diocesana-, finaliza el V Plan Director de la Catedral y la ciudad suma un nuevo recurso cultural y turístico
“El trabajo que hemos realizado desde 2012, en colaboración con el Obispado, ha sentado las bases para que Santander sea reconocida como una ciudad que cuida su patrimonio”, subraya Igual
La alcaldesa Gema Igual y el obispo de Santander, Arturo Ros, han inaugurado este jueves el Bastión de la Catedral, un espacio de interpretación histórica, cultural, espiritual y de atención al peregrino con el que culmina además el V Plan director de la catedral.
En el acto, han estado acompañados por los concejales de Cultura y Fomento, Noemí Méndez y Agustín Navarro respectivamente; el arquitecto David Arce; el vicario general, Álvaro Asensio Sagastizábal; y el vice-ecónomo Manuel María Moxó.
“El trabajo que hemos realizado desde 2012, en colaboración con el Obispado, ha sentado las bases para que Santander sea reconocida como una ciudad que cuida su patrimonio”, ha subrayado Igual, para quien este proyecto forma parte de la alianza estratégica que mantienen ambas instituciones y refleja el trabajo conjunto por el bien común.
“Inauguramos un espacio que se integra plenamente en la vida cultural de Santander, aportando nuevas oportunidades para conocer la identidad de nuestra ciudad y seguir posicionándola como referente turístico y cultural en el norte de España”, ha destacado.
Ubicado en la esquina de la calle Somorrostro, el Bastión de la Catedral acoge desde hoy la exposición permanente de la maqueta de Santander en el siglo XVIII, ideada por José Luis Casado Soto y realizada en 2005 con motivo de la conmemoración del título de ciudad a Santander. Junto con la maqueta, próximamente se instalarán las láminas basadas en el trabajo de Casado Soto con el objetivo de completar el proceso histórico de la ciudad, -desde los primeros pobladores (s. IV a. C.), hasta el incendio de 1941.
Igualmente, incluye la Oficina de Atención al Peregrino, donde estos visitantes -que la alcaldesa ha cifrado en unos 2.000 al año- podrán recibir información, apoyo y orientación; y la librería diocesana, que está dedicada a la difusión del conocimiento, la cultura y la espiritualidad, ofreciendo una amplia selección de libros y materiales.
“El Bastión de la Catedral es un tributo a nuestro pasado, pero también una fuente de inspiración para el futuro. Además, supone un activo educativo y un valioso recurso para ayudar a difundir entre las nuevas generaciones los cambios que ha experimentado la capital cántabra”, ha añadido la regidora.
Igual ha invitado a vecinos y visitantes a descubrir este nuevo espacio y ha explicado que como las obras del antiguo Banco de España están en curso, se trabaja en un acceso provisional, cómodo y seguro, a través de la fachada de El Cristo y el patio existente.
Por su parte, Arturo Ros ha manifestado que este lugar está llamado a ser fundamentalmente la oficina del peregrino, por los que vienen permanentemente a la Catedral o al Cristo a pedir información o a sellar las credenciales.
“La Diócesis aporta también a este servicio parte de las cosas que tiene para que los visitantes puedan hacer uso, consultar, adquirir libros o recuerdos. Hemos aprovechado el espacio y vamos a facilitar la atención a la gente con el estilo que queremos mantener, como lugar de acogida y acompañamiento”, ha señalado el obispo.
Alianza Ayuntamiento – Obispado
El Bastión de la Catedral ha conllevado una inversión municipal de 23.400 euros para la obra civil, incluyendo la construcción de un almacén, instalación de electricidad, iluminación y datos; el acceso provisional por el patio existente, así como reparaciones, pintura y limpieza. Además, se han aportado 21.000 euros más para mobiliario y señalética, que incluye el puesto de control de acceso, estanterías y mobiliario de espera, así como la reproducción facsímil de las imágenes de Casado Soto.
Por su parte, el Obispado se ha encargado de climatizar el local, completar la instalación contra incendios y acondicionar el patio de acceso provisional.
Este recurso se suma a una serie de actuaciones que el Ayuntamiento y el Obispado han llevado a cabo en los últimos años, como la remodelación de las dependencias capitulares, que incluyeron la mejora de la estructura exterior e interior del edificio y la puesta en valor de los muros de piedra del castillo de San Felipe, la capilla de San Pedro, el muro medieval o el refugio antiaéreo de la Guerra Civil.
Además del Plan Director de la Catedral, la colaboración entre el Ayuntamiento y el Obispado ha dado lugar a la integración de la Torre de la Catedral como centro de interpretación de la historia de la ciudad, la nueva Plaza Eguino y Trecu; así como la mejora de la calle Obispo Juan Plaza y la remodelación de las calles Somorrostro y Los Azogues, que ha permitido recuperar la calle más antigua de la ciudad y que incluye actuaciones arqueológicas donde se han puesto en valor vestigios históricos de épocas romana y medieval.
El Bastión de la Catedral
Su ubicación estratégica, junto a la Catedral y en el corazón de la ciudad, lo convierte en un punto clave para fomentar el turismo cultural y religioso, atrayendo a visitantes de todas partes y ampliando la oferta de actividades para los vecinos.
La exposición permanente de la maqueta de Santander en el siglo XVIII, que ocupa un lugar destacado dentro del Bastión, y a la que se unirá en breve las imágenes de Casado Soto, representa una herramienta educativa, un recurso para investigadores y un atractivo único para los turistas.
La Oficina de Atención al Peregrino es otro ejemplo de cómo este espacio será un lugar vivo y dinámico. Está destinada a convertirse en punto de referencia donde encontrar no sólo información y orientación, sino también un ambiente acogedor que refleje la hospitalidad de la ciudad.
Por último, la Librería Diocesana además de ser un espacio de venta de libros, ha sido concebida como un lugar donde la cultura y la espiritualidad se entrelacen. Su existencia es una invitación para quienes deseen explorar el conocimiento, la historia y la fe.
