El portavoz socialista, Daniel Fernández, ha visitado las instalaciones y comprobado que el Ayuntamiento de Santander lleva años sin efectuar el mantenimiento adecuado, por lo que el césped artificial, las gradas, o los vestuarios “están en un estado lamentable”
Los socialistas santanderinos señalan que el recinto se cierra en julio, y al faltar personal y seguridad la gente acceda sin control por las noches llenando todo de suciedad y cristales cuando allí entrenan 25 equipos como el Nueva Montaña y el Perines, de categoría nacional.
El Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Santander exige al equipo de Gobierno que repare cuanto antes “las graves deficiencias” que existen en las instalaciones del campo de Fútbol Vicente Miera, donde juegan y entrenan 25 equipos, lo que supone más de 500 chavales todos los fines de semana.
El portavoz municipal, Daniel Fernández, ha denunciado el “estado de abandono” en el que se encuentra y urge al Consistorio a “incluir” su renovación entre las actuaciones prioritarias, ya que es uno de los pocos campos que se ha quedado fuera de las inversiones.
Fernández ha visitado en recinto tras las numerosas quejas recibidas, y ha comprobado el deterioro del césped artificial, lleno de parches, destrozado y desgastado; los vestuarios con humedades, la suciedad y el descuido de las gradas y de toda la instalación en general.
A su juicio, “es inaceptable” que un campo que tan solo lleva 10 años abierto “presente semejante estado de abandono debido a un mantenimiento nulo”, ha enfatizado.
“Parece imposible pensar que el Ayuntamiento de Santander tenga tan descuidado un campo municipal por el que pasan semanalmente cerca de 500 chavales para jugar y entrenar. Es bochornoso que no apueste por la seguridad de quienes practican un deporte y que permita que el campo esté en un estado tan lamentable, fruto de la falta de inversiones y de un correcto mantenimiento”, ha subrayado.
Así, ha asegurado que los vestuarios se encuentran “en muy mal estado”, lo que ofrece una imagen “de absoluto descuido” a los quipos visitantes. “Hay que tener en cuenta que en este campo entrenan equipos como el Nueva Montaña y el Perines, que es un equipo juvenil de división de honor y de categoría nacional. No podemos ofrecer esa imagen de caos, suciedad y abandono”, ha incidido.
Riesgo de lesiones
Asimismo, ha señalado que las malas condiciones del césped suponen un riesgo añadido de lesiones debido a la erosión, y a que los jugadores están empezando a utilizar calzado que no es adecuado para la práctica del fútbol.
También ha explicado que en el mes de julio se cierra el campo, que el personal se traslada al complejo Ruth Beitia para el refuerzo de los cursillos y campamentos de verano, por lo que la gente accede sin control, se reúnen chavales haciendo botellón y el campo y el recinto acaba lleno de suciedad y cristales rotos.
Esta situación de descontrol que se produce casi todos los fines de semana, y sobre todo en el mes de julio, supone que el personal, e incluso los propios jugadores, tengan que hacer labores extra de mantenimiento para evitar lesiones.
Finalmente, ha insistido en la necesidad de que el PP “revise prioridades, apueste de verdad por el deporte de base con instalaciones que sean adecuadas y que tengan el correcto mantenimiento”, y que además “trate con la dignidad que se merecen” a nuestros equipos y a los equipos visitantes.