La agresión al maquinista ha tenido lugar en la línea de Los Corrales de Buelna
La ausencia de revisores y de guardias de seguridad supone un problema real para viajeros y trabajadores
La Sección Sindical de CCOO en Renfe ha asegurado que al agresor ya se le había informado en Santander que la última parada del tren era Los Corrales de Buelna y no Reinosa. David Cuerdo: “Exigimos a la empresa que adopte medidas urgentes porque la escalada de violencia va en aumento y tanto el personal como la ciudadanía se siente indefensa ante la enorme inseguridad que existe en el servicio ferroviario de Cantabria”.
La Sección Sindical de Comisiones Obreras de Cantabria (CCOO) en Renfe ha denunciado una nueva agresión en el servicio ferroviario de Cantabria. En esta ocasión, un viajero que se había subido al tren que conecta Santander con Los Corrales de Buelna este pasado martes agredió a un maquinista porque el convoy no llegaba hasta Reinosa.
La representación sindical de CCOO ha asegurado que ya en Santander el agresor había sido informado de que la línea C1 en ese horario tenía como destino final Los Corrales de Buelna pero una vez llegado a la estación término, la emprendió con el maquinista en un nuevo episodio de violencia que, “por desgracia, se está comenzando a convertir en habitual o rutinario”, ha lamentado David Cuerdo, delegado de CCOO en Renfe.
Para Cuerdo, “es imprescindible que la empresa adopte medidas urgentes para garantizar la seguridad de la plantilla y de las personas que utilizan el transporte ferroviario porque la escalada de violencia y agresiones va en aumento y nos sentimos indefensos ante la enorme inseguridad que existe en el servicio”.
La representación sindical de CCOO ha subrayado que en el próximo Comité de Seguridad y Salud que está previsto que se celebre este mismo viernes, 27 de septiembre, reclamará a la empresa medidas para garantizar la seguridad y, concretamente, un aumento considerable de los efectivos de seguridad privada tanto a bordo de los trenes como en las estaciones y apeaderos.
“Hace unos meses ya pusimos en conocimiento de la Delegación del Gobierno de Cantabria los problemas de seguridad que existen en la red ferroviaria de la región y, en su contestación, dejaron claro que el ejercicio de las funciones de vigilancia correspondía al Grupo Renfe. Es por eso que exigimos a la empresa que incremente los recursos para frenar las agresiones, las amenazas y la violencia en general”, ha incidido Cuerdo.
Además, ha criticado que el proyecto Renfe Smart Security Station de videovigilancia inteligente que se está desarrollando con fondos europeos y que estaba previsto que culminara su implementación en 2024, “ni está ni se le espera”.
“Las cámaras no funcionan y como ejemplo el suceso reciente de un robo de cartera. No se puedo identificar al ladrón porque las cámaras no funcionaban”, ha dicho el representante de CCOO en Renfe.